Sé que ha pasado mucho tiempo desde la primera vez que inicié este blog. Y en este momento decidí:
- Publicarlo (no recordaba que lo había dejado como draft únicamente)
- Retomarlo, con la finalidad de expresar mis sentimientos
Miles de cosas han sucedido desde el año pasado relacionadas a la pandemia, temas personales, laborales… de todo un poco. Sin embargo, derivado de cambios que ocasionó el COVID en planes que ya tenía definidos, fui postergando la decisión de renunciar a mi trabajo para emprender un negocio propio.
No fue una decisión sencilla… la verdad es que si me tomé bastante tiempo para analizar muy bien esta idea de ”dejar de trabajar” y ”predecir” posibles consecuencias a futuro. Gracias al apoyo que recibí de mi esposo y mi familia, logré concretar mi decisión y comencé a identificar fechas en las que ya no quería estar trabajando en la empresa.
El día de ayer oficialmente entregué mi laptop y podría decirse que ya estoy casi concluyendo el proceso, ya que aún falta la parte de mi finiquito. Pero… oficialmente sin laptop equivale a literalmente ya no hay algo tangible que esté aquí conmigo “diciéndome” que debo seguir trabajando.
Aquí algunas cosas que quiero compartir respecto a lo que sentí, hice y pensé ayer y el día de hoy.
Septiembre 20, 2021
- Sentí nervios al momento de entregar mi laptop, más que nada porque de cierta manera era lo que me ataba al trabajo y porque con esto de la pandemia, la entrega de mi laptop se manejó a través de un servicio de transporte.
- Sentí una liberación que esperaba sentir en cuanto tomé la decisión de renunciar.
- La primera canción que puse en Spotify fue “I Want To Break Free” de Queen, muy acorde a lo que estaba viviendo.
- Mi esposo me consintió con un desayuno delicioso para festejar, Hot Cakes y chocolate.
- Me entretuve organizando cosas en nuestro departamento.
- En la tarde me sentía con una sensación algo extraña de no “tener forzosamente” algo que hacer, pero se mantenía aún ese sentimiento de liberación.
- Al final del día me sentía algo cansada y como con algo de post-estrés (término que uso para referirme a un estado en el que mi cuerpo aún no logra relajarse debido a las muchas cosas que ha vivido recientemente, como que se queda en estado de tensión por unos cuantos días, ¿alguien que también se relacione con esto?).
Septiembre 21, 2021
- Desperté con algo de flojera y decidí no hacer mi rutina de ejercicio para darle a mi cuerpo tiempo de recuperarse por todo el estrés vivido durante el proceso de renuncia en semanas anteriores.
- Después del desayuno comencé a sentirme algo “depre”, triste…
- Honestamente, lloré… en ese momento sentía que quizás ya no tenía un propósito específico en cuanto a mi vida laboral, cosa que sé no es cierto
- Por 4 años mi vida había consistido en un trabajo, lo cual era lo único “constante”, por así decirlo. Renunciar a mi trabajo sin otro trabajo en la mira, es algo que no muchos hacen o que muchas personas ven extraño (aquí donde entran las expectativas), por lo que sentía como su hubiera fallado.
- Platiqué con mi esposo sobre todo esto y me ayudó muchísimo.
- Sentí que no todo estaba perdido, hay esperanza, hay muchas cosas que quiero intentar por mi cuenta y estoy en un periodo en el que también debo descansar para recuperarme antes de comenzar algo nuevo.
- Me di cuenta que me cuesta “no hacer nada”. Cuando “no hacer nada” está bien de vez en cuando. Especialmente en este momento en mi vida en el que en verdad necesitaba un respiro del trabajo.
- Aún tengo algo de post estrés, pero debo manejarlo e intentar relajarme más.
- Recurrí a la escritura para liberar mis emociones.
- Oficialmente publiqué este blog y mis posts anteriores que tenía como draft.
- Escribir cura el alma.
Y bueno, aquí estoy ahora, a punto de comenzar una nueva aventura de emprender algo propio, aprender cosas nuevas por mi cuenta y seguir avanzando en la vida. Motivada a ver qué es lo que mañana me espera y a vivir nuevas experiencias para seguir creciendo como persona.
Nota adicional – Comenzó a llover y eso hace que esta noche sea perfecta para un tecito antes de dormir.
“Si esperamos hasta que estemos listos, entonces esperaremos por el resto de nuestras vidas”
Lemony Snicket
